Rumichaca es el puente internacional que no solo une a nuestro país con la hermana República de Colombia, es también la puerta de entrada de miles de migrantes venezolanos, un lugar que además une sueños y esperanzas.
Son las 11:30, la niebla generada por un abrasador sol se siente en el aire, vehículos que salen y entran de Ecuador se pueden apreciar en ambos costados del Puente Internacional de Rumichaca, a lo lejos se divisa una fila de gente que carga maletas, cobijas, mascotas, recuerdos conjugan entre lágrimas, miradas anhelantes de paz; esta es la realidad que viven los migrantes de la República Bolivariana de Venezuela.
La espera para ingresar a las oficinas de migración no es larga, pequeños grupos de personas ingresan por las vallas metálicas para esperar el turno y legalizar su situación migratoria, a pocos pasos de la Casa de Aduanas se encuentra Senaí Rodríguez, quien mientras alimenta a su pequeña hija cuenta su ardua experiencia. “Vengo desde Carabobo (Venezuela) y llevo ocho meses en este proceso de salida, estaba apostada en Barranquilla pero llegué a Ecuador ayer, me ayudaron con el alojamiento y el alimento para mi pequeña. Ser migrante no es nada bueno, espero que el pueblo salga y todo marche bien en mi país y poder regresar a mi casa”, manifestó.
Expectativa
Muy cerca, refrescándose con un poco de agua está Jesús Mesa, quien llegó al país la noche del martes, menciona que lleva seis días viajando desde Venezuela hasta Rumichaca, su primera impresión en el Ecuador fue la ayuda que se presta para el migrante. “Aquí le brindan auxilio, seguridad, comida y atención médica inmediata”, señaló. Expectante ante la situación actual de su nación menciona que: “está bien lo que se está haciendo, las Fuerzas Armadas deben rebelarse para que todo esto se acabe, allá tengo mi casa y mi carro”.
Mientras juega con sus hijos, Leiby Valdés cuenta que llegó al Ecuador hace tres días, está muy agradecida e impresionada por la atención y los servicios que le brindaron, con respecto al levantamiento armado opina que “es una locura, le doy Gracias a Dios que salimos de allí, la liberación no se debe alcanzar mediante la violencia, quiero buscar un futuro para mis hijos aquí”.
Ayuda
En la frontera norte, las diversas Organizaciones No Gubernamentales y entidades nacionales continúan prestando su atención, Jhoel Vera, técnico del Plan de Movilidad emprendido por la Cruz Roja Ecuatoriana, menciona que diariamente se atiende de 350 a 400 personas mediante el restablecimiento de contacto con sus familiares vía llamadas internacionales, mensajería instantánea (WhatsApp) y redes sociales, además de la entrega de kits, atención de primeros auxilios y asesoría legal. Por su parte la Organización Internacional para la Migraciones (OIM) presta su servicio de transporte humanitario, hospedaje y alimentación de perfiles vulnerables, entrega de kits y asesoramiento en procesos migratorios.
Entre tanto, Santiago Chávez, viceministro de Movilidad Humana de la Cancillería de Ecuador, anunció que la declaratoria de emergencia que aplica desde el año pasado para atender el flujo de migrantes venezolanos, se extenderá hasta el 31 de mayo en las provincias de Carchi, Pichincha y El Oro. (APRN)
Fuente: La hora
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