INVIERNO. La intensa lluvia se registró ayer en horas de la madrugada.
Hasta el cierre de esta edición, el servicio de agua potable no se restablecía.
NANGARITZA. El aguacero registrado ayer en la madrugada en la ciudad de Guayzimi, capital del cantón Nangaritza, dejó daños en varios sectores de la urbe.
El mayor problema registrado por las autoridades del cantón fue por el desbordamiento de la quebrada central de la ciudad de Guayzimi, lo que afectó considerablemente a las viviendas ubicadas a lo largo de la calle 26 de Noviembre y 19 de Noviembre. El agua ingresó a los domicilios con lodo y sedimentos. El sistema de alcantarillado del sector también se vio afectado.
Las fuertes lluvias también provocaron el desbordamiento de la quebrada Acapulco, dejando completamente anegado de escombros al estadio de la ciudad de Guayzimi.
Por otra parte se detectó una inundación en la calle Nangaritza entre Carlos Vélez y 12 de Octubre, causando el desplome de una pared de la vivienda de la ciudadana Marielen Merino Troya. Los enseres de la casa se destruyeron.
Otros daños
También se registraron otros daños, aunque menores, en diferentes barrios de la urbe de Guayzimi. Ante ello, el Municipio de Nangaritza destinó desde tempranas horas de ayer al personal y la maquinaria pesada, para realizar el respectivo desalojo de materiales y la rehabilitación de sumideros y encauzamientos de las dos quebradas, según informó Galo Illescas, director de Obras Públicas de la Municipalidad.
Además, el servicio de agua potable, hasta el cierre de esta edición, estaba suspendido.
Recorrido
Los concejales y directores departamentales de la Municipalidad, desde las primeras horas de la mañana, recorrieron los diferentes sectores afectados, para evaluar de forma exhaustiva y determinar las problemáticas, y poner en conocimiento a los funcionarios de la Secretaría de Gestión de Riesgos de la provincia. Así lo detalló Bladimir Rosales, director de Planificación de la Municipalidad de Nangaritza. (JGN)
Criterios de afectados
Teófilo Zhiñín Zaruma, quien vive en la calle 26 de Noviembre, comentó que “esto parecía un río, la alcantarilla se taponó y en cuestión de minutos el agua con mucho lodo invadió las habitaciones y desapareciendo cerca de 50 aves de corral”.
“Hemos perdido nuestra mercadería y esperamos la ayuda de las autoridades competentes de la provincia”, indicó por su parte José Namicela Chuqui, otro de los afectados por la lluvia.
Fuente: La Hora.
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