Perfomance

martes, 17 de mayo de 2016

Ex-Gerente de Petroecuador ya está Detenido por Fraude Tributario con Red de Corrupción. También consta en los Panama Papers

Álex Bravo es investigado por presuntos tráfico de influencia y fraude tributario. Las reacciones llueven.

El exgerente de la empresa pública Petroecuador Álex Bravo fue detenido ayer con fines de investigación y hasta el cierre de esta edición, no se vislumbraba una hora para una eventual formulación de cargos. A él se lo investiga por los presuntos delitos de tráfico de influencias y fraude tributario.

El primero es tipificado en el artículo 285 del Código Penal y sancionado con una pena de tres a cinco años de prisión.

El fiscal general, Galo Chiriboga, dijo ayer desde Cuenca que no se descarta tampoco un supuesto enriquecimiento privado no justificado, que también es sancionado con una pena de tres a cinco años de prisión.

El exfuncionario de Petroecuador fue detenido ayer en horas de la mañana, en su domicilio, ubicado en el sector de Tumbaco, en el nororiente de Quito y, luego de algunas diligencias en ese sector, fue trasladado a la Unidad de Flagrancia de la capital, donde se le receptó su versión libre y voluntaria, sin juramento.

Según la Fiscalía, el caso viene siendo investigado desde el pasado lunes. Las primeras investigaciones de Fiscalía dan cuenta de que Bravo habría otorgado contratos a tres empresas privadas que pertenecerían a sus familiares. No obstante, también aparece en el listado de los ‘Panama Papers’.

Durante el allanamiento al domicilio de Bravo, la Fiscalía incautó equipos informáticos como: documentos, seis teléfonos celulares, una tableta y una computadora portátil.



Su historia

Bravo fue el primer esmeraldeño en ocupar la Gerencia General de Petroecuador. Fue, además, el gerente más joven que ha tenido la petrolera estatal.

Hace 10 años se vinculó con la empresa pública en el área de proyectos, estando al frente del programa de rehabilitación de la Refinería de Esmeraldas, como responsable del contrato con la empresa coreana South Korea Engineering & Construction (SK E&C).

También fue el encargado del contrato con la empresa inglesa Krikorian, Bryce and Close (KBC) para la implementación de Buenas Prácticas en la industria de refinación del petróleo para la Refinería.

También estuvo a cargo del contrato con la Universal Oil Product (UOP) para el desarrollo de las Ingenierías Básicas y de Detalle de la Unidad de Fraccionamiento Catalítico Fluidizado (FCC), y de los contratos con la empresa australiana Worley Parsons para el Gerenciamiento y Fiscalización del programa de Rehabilitación de la entidad.



Reacciones


“¡Qué bueno!”, exclamó la asambleísta María Augusta Calle (PAIS), al enterarse de la detención de Bravo. Agregó que si alguien ha tenido una actitud antiética y se ha aprovechado del dinero público desde que tener una sanción, y más aún si es alguien que ha tenido un cargo importante dentro del Gobierno. “Una persona a la que se la ha dado toda la confianza, esa es una traición a la confianza de quienes estamos en este proceso por convicción profunda “, dijo la legisladora. Por su parte, el opositor César Solórzano (Sociedad Patriótica), dijo que, aunque desconfía de la independencia del sistema de justicia, espera que “esta vez sí funcione”. Añadió que se debería ampliar la investigación y realizarse a fondo; él no cree que Bravo sea el único funcionario que posiblemente podría estar involucrado en irregularidades. “Estoy seguro de que debe haber más”, manifestó Solórzano.

El secretario jurídico de la Presidencia, Alexis Mera, también se pronunció ayer en rueda de prensa. En reiteradas ocasiones Mera se esforzó para repetir que Bravo “no es funcionario político” de este Gobierno. Luego, confirmó el inicio de la investigación.

“Es un funcionario de carrera. Insisto, no es nombramiento político y a lo largo de los años trabajó en el sector hidrocarburífero y fue designado Presidente de Petroecuador por su estabilidad y por su trayectoria técnica. Insisto en que no es funcionario político de nuestro Gobierno como pasa en otros países del mundo”, insistió. (LC/HCR/SC/JSG)





LAS CIFRAS:



5
años es la pena máxima para el delito de tráfico de influencias.



3
años es la pena mínima.







LA FRASE:





“Una persona a la que se la ha dado toda la confianza, esa es una traición”.


María Augusta Calle
Asambleísta de PAIS.







“Estoy seguro de que debe haber más personas (involucradas)”.


César Solórzano,
Asambleísta de Sociedad Patriótica.

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