El Ministerio de Salud Pública (MSP) ejerce la rectoría, regulación, planificación, coordinación, control y gestión de la Salud Pública ecuatoriana a través de la gobernanza y vigilancia y control sanitario, garantizando el derecho a la Salud a través de la provisión de servicios de atención individual, prevención de enfermedades, promoción de la salud e igualdad, la gobernanza de salud, investigación y desarrollo de la ciencia y tecnología; articulación de los actores del sistema, con el fin de garantizar el derecho a la Salud.
El MSP ha tratado desde siempre la patología de labio fisurado y paladar hendido, captando a los niños que nacen con esta mal formación. Así en el año 2014 el MSP implementó el instructivo para el abordaje del Labio Fisurado y Paladar Hendido, desarrollado a través de un programa nacional; que permite corregir estas malformaciones congénitas y y mejorar así la calidad de vida de la población.
La captación de estos pacientes se realiza de manera frecuente, tanto en los centros de salud de primer nivel como del segundo nivel de atención. Antes de ser sometido un niño a un proceso quirúrgico, se le enseña a la madre la manera correcta de como alimentarlo, recalcando que la mejor alimentación es la leche materna.
Los procesos quirúrgicos se realizan permanentemente en el año, de manera regular. Cada vez que es captado un paciente, se le da la atención con esta malformación de manera integral.
En la zona 7 de Salud, las malformaciones de labio fisurado y paladar hendido las resuelven quirúrgicamente los hospitales: Isidro Ayora de Loja y Teófilo Dávila de Machala; demostrando así que las unidades de salud cuentan con la capacidad resolutiva para atender estos casos; y seguirá prestando este servicio de la misma forma cómo lo ha venido haciendo en favor de la población que así lo requiera.
Valga mencionar que el tratamiento va más allá de una intervención quirúrgica. El objetivo es obtener un resultado satisfactorio en los diversos aspectos: sicológico, estético, de la audición y el habla y desarrollo de la dentición/masticación que están afectados por la malformación.
El niño con paladar hendido y labio fisurado debe desarrollarse normalmente, hablar de un modo comprensible y no presentar estigmas que le dificulten su vida normal. Todo ello se consigue con la estrecha relación entre los profesionales y los padres de familia.
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