Toda persona activa en redes sociales como Facebook o Twitter y con algo de interés en la política y la realidad nacional con seguridad se debe haber cruzado con un vídeo de Edgar Jara, un ecuatoriano que en los últimos años ha ganado notoriedad debido a publicaciones en las que evidencia problemas en el manejo del Gobierno, que se caracterizan por platear alternativas sin perder el respeto y la objetividad.
Jara, guayaquileño de 48 años, quien se radicó en Estados Unidos hasta hace dos años, es un empresario con estudios en ciencias políticas y administración de empresas, especializado en migración y familia, quien nunca perdió el contacto con el país, pero que se activó políticamente recién hace 9 años, a partir del discurso de posesión del presidente Rafael Correa que cerró con la frase ‘hasta la victoria siempre’, que le generó una reacción negativa automática.
Ese mismo día se topó con otra frase, “la indiferencia es el mejor enemigo del hombre, la indiferencia ayuda al opresor, no al oprimido”, que lo impulsaría a no estar callado y a compartir su criterio a través de videos que colgaba en redes sociales y que inmediatamente tuvieron repercusión en Estados Unidos y en países con gran presencia de migrantes ecuatorianos, no así dentro del Ecuador lo cual se mantuvo casi inalterable hasta que un video en particular lo hizo viral.
En 2014, Edgar Jara asistió a la Universidad de Harvard para escuchar una conferencia del presidente ecuatoriano, recordada más por la forma de hablar inglés que por su contenido. Tras salir del auditorio Jara gravó un análisis este episodio que en menos de 78 horas tuvo más de 400.000 reproducciones, esta vez dentro del país, lo que desencadenó que la gente comience a ver la serie de videos que había compartido hasta ese momento.
El político cibernético
Previamente formó parte del surgimiento de CREO, asumiendo luego la presidencia de la organización en Estados Unidos y Canadá y representándola internacionalmente, sin embargo su relación con esta organización política terminó a partir de que se candidatizó a Guillermo Laso, pues discrepa de su idoneidad y estilo de hacer política. No obstante esta experiencia le permitió acercarse más con la gente y sus aspiraciones, en las cuales no solo coincidía, sino también, considera, calza su perfil.
“El 75% (…) de ecuatorianos dicen que quieren una figura nueva, ya no quieren a los políticos de siempre ni quiere a esta revolución, en ese espectro político entre yo, vamos a pelear como figura nueva”, sostiene Jara.
Hace un año y dos meses fue motivado a formar parte de otra organización política en surgimiento, hoy denominada Movimiento Ciudadano por el Cambio que asegura contar con las firmas necesarias para poder participar en el proceso electoral de 2017, en su caso como candidato a la Presidencia de la República.
Aclara que sin ser un hombre rico, ha logrado una estabilidad en su negocio, tras múltiples caídas, que le ha permitido financiar el arranque de este proyecto, pues llegó un momento en que debió depender del grupo que lo respalda con auspicios y con una labor voluntaria. Destaca que en la recolección de medio millón de firmas para inscribir al movimiento no se ha gastado un dólar, pues lo han hecho las bases de la organización que se activaron, como él, en las redes sociales. (CAB)
Su opinión en la red
A más de ser una manera gratuita de comunicarse, las redes sociales tienen un impacto masivo en el público. En el caso de Edgar Jara ha llegado a registrar en un video más de 1’200.000 reproducciones en menos de 78 horas solo en Ecuador y empleando únicamente su teléfono celular.
“Esto me ha permitido entrar a millones de personas, la gran mayoría jóvenes de 16 a 37 años, que es el 57% de votantes a nivel nacional”, destaca el político cibernético, quien mantiene la misma línea de análisis desde el inicio de su activismo como un mandante más del presidente Rafael Correa, a quien le pedía audiencia para plantearle los problemas que veía y su opinión para que se les dé solución.
Por ejemplo Jara invitó a Correa formalmente a un debate, pero la respuesta que obtuvo de la Cancillería, dice, fue que el presidente no podía debatir con alguien que no era candidato. Posteriormente, le planteó un conversatorio, con una agenda predefinida sobre temas como el empleo que Jara lo considera su fuerte debido a su experiencia empresarial. La respuesta en este caso fue el silencio, pero sin que eso signifique pasar desapercibido.
Ahora en cada ciudad que Jara visita hay personal de inteligencia tomando fotos, escuchando lo que dice, “tanto que me acostumbré y a muchos los conozco y nos saludamos”, dice con naturalidad Edgar Jara, para quien ese no es un problema, a diferencia del efecto contrario que tienen sus planteamientos y denuncias.
Destaca el caso de una denuncia respaldada en video sobre una asambleísta de Alianza País que vive en Calceta (Manabí), en la que dispone de unas donaciones para los damnificados del terremoto en su domicilio y ordena que otras queden para la gente a la que trata en términos despectivos. Se la planteó inicialmente de forma reservada al presidente, dice Jara, luego se la hizo pública, pero en respuesta se consiguió que esa asambleísta sea nombrada ministra.
Caso similar ocurrió con la denuncia que presentó sobre los becarios, en la que advirtió que de los 950 beneficiarios, 650 son hijos de funcionarios de la revolución y además no alcanzan un rendimiento académico básico. En lugar de una rectificación, lo que consiguió fue que se le lleve la contraria y se monte una campaña para opacar la denuncia.
La propuesta
Movimiento Ciudadano
La generación de empleo y reducción de impuestos para generar confianza e inversión.
Fomento a la agricultura y agroindustria con tecnificación y mejores condiciones de comercialización.
Impulsar el turismo en condiciones competitivas con otros destinos del continente.
Generar un modelo político propio.
Tome nota
Su movimiento ya está estructurado en 24 provincias, en Estados Unidos y Canadá, así como en Europa, Asia y Oceanía. En Loja su representante es Patricio Saavedra.
Jara, guayaquileño de 48 años, quien se radicó en Estados Unidos hasta hace dos años, es un empresario con estudios en ciencias políticas y administración de empresas, especializado en migración y familia, quien nunca perdió el contacto con el país, pero que se activó políticamente recién hace 9 años, a partir del discurso de posesión del presidente Rafael Correa que cerró con la frase ‘hasta la victoria siempre’, que le generó una reacción negativa automática.
Ese mismo día se topó con otra frase, “la indiferencia es el mejor enemigo del hombre, la indiferencia ayuda al opresor, no al oprimido”, que lo impulsaría a no estar callado y a compartir su criterio a través de videos que colgaba en redes sociales y que inmediatamente tuvieron repercusión en Estados Unidos y en países con gran presencia de migrantes ecuatorianos, no así dentro del Ecuador lo cual se mantuvo casi inalterable hasta que un video en particular lo hizo viral.
En 2014, Edgar Jara asistió a la Universidad de Harvard para escuchar una conferencia del presidente ecuatoriano, recordada más por la forma de hablar inglés que por su contenido. Tras salir del auditorio Jara gravó un análisis este episodio que en menos de 78 horas tuvo más de 400.000 reproducciones, esta vez dentro del país, lo que desencadenó que la gente comience a ver la serie de videos que había compartido hasta ese momento.
El político cibernético
Previamente formó parte del surgimiento de CREO, asumiendo luego la presidencia de la organización en Estados Unidos y Canadá y representándola internacionalmente, sin embargo su relación con esta organización política terminó a partir de que se candidatizó a Guillermo Laso, pues discrepa de su idoneidad y estilo de hacer política. No obstante esta experiencia le permitió acercarse más con la gente y sus aspiraciones, en las cuales no solo coincidía, sino también, considera, calza su perfil.
“El 75% (…) de ecuatorianos dicen que quieren una figura nueva, ya no quieren a los políticos de siempre ni quiere a esta revolución, en ese espectro político entre yo, vamos a pelear como figura nueva”, sostiene Jara.
Hace un año y dos meses fue motivado a formar parte de otra organización política en surgimiento, hoy denominada Movimiento Ciudadano por el Cambio que asegura contar con las firmas necesarias para poder participar en el proceso electoral de 2017, en su caso como candidato a la Presidencia de la República.
Aclara que sin ser un hombre rico, ha logrado una estabilidad en su negocio, tras múltiples caídas, que le ha permitido financiar el arranque de este proyecto, pues llegó un momento en que debió depender del grupo que lo respalda con auspicios y con una labor voluntaria. Destaca que en la recolección de medio millón de firmas para inscribir al movimiento no se ha gastado un dólar, pues lo han hecho las bases de la organización que se activaron, como él, en las redes sociales. (CAB)
Su opinión en la red
A más de ser una manera gratuita de comunicarse, las redes sociales tienen un impacto masivo en el público. En el caso de Edgar Jara ha llegado a registrar en un video más de 1’200.000 reproducciones en menos de 78 horas solo en Ecuador y empleando únicamente su teléfono celular.
“Esto me ha permitido entrar a millones de personas, la gran mayoría jóvenes de 16 a 37 años, que es el 57% de votantes a nivel nacional”, destaca el político cibernético, quien mantiene la misma línea de análisis desde el inicio de su activismo como un mandante más del presidente Rafael Correa, a quien le pedía audiencia para plantearle los problemas que veía y su opinión para que se les dé solución.
Por ejemplo Jara invitó a Correa formalmente a un debate, pero la respuesta que obtuvo de la Cancillería, dice, fue que el presidente no podía debatir con alguien que no era candidato. Posteriormente, le planteó un conversatorio, con una agenda predefinida sobre temas como el empleo que Jara lo considera su fuerte debido a su experiencia empresarial. La respuesta en este caso fue el silencio, pero sin que eso signifique pasar desapercibido.
Ahora en cada ciudad que Jara visita hay personal de inteligencia tomando fotos, escuchando lo que dice, “tanto que me acostumbré y a muchos los conozco y nos saludamos”, dice con naturalidad Edgar Jara, para quien ese no es un problema, a diferencia del efecto contrario que tienen sus planteamientos y denuncias.
Destaca el caso de una denuncia respaldada en video sobre una asambleísta de Alianza País que vive en Calceta (Manabí), en la que dispone de unas donaciones para los damnificados del terremoto en su domicilio y ordena que otras queden para la gente a la que trata en términos despectivos. Se la planteó inicialmente de forma reservada al presidente, dice Jara, luego se la hizo pública, pero en respuesta se consiguió que esa asambleísta sea nombrada ministra.
Caso similar ocurrió con la denuncia que presentó sobre los becarios, en la que advirtió que de los 950 beneficiarios, 650 son hijos de funcionarios de la revolución y además no alcanzan un rendimiento académico básico. En lugar de una rectificación, lo que consiguió fue que se le lleve la contraria y se monte una campaña para opacar la denuncia.
La propuesta
Movimiento Ciudadano
La generación de empleo y reducción de impuestos para generar confianza e inversión.
Fomento a la agricultura y agroindustria con tecnificación y mejores condiciones de comercialización.
Impulsar el turismo en condiciones competitivas con otros destinos del continente.
Generar un modelo político propio.
Tome nota
Su movimiento ya está estructurado en 24 provincias, en Estados Unidos y Canadá, así como en Europa, Asia y Oceanía. En Loja su representante es Patricio Saavedra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario