El título en los 100 metros vallas que ganó es el primero de un ecuatoriano en un mundial juvenil. Vive con su abuela.
Seria, tranquila y muy solidaria, así califica Gledis Arroyo (62 años) a su nieta, Maribel Vanessa Caicedo, quien el pasado jueves se adjudicó la medalla de oro en los 100 metros vallas femeninos del Campeonato Mundial Juvenil Cali 2015.
“Maribel nunca me ha dado de qué quejarme. Es una chica buena y dedicada”, comenta doña Gledis a EL TELÉGRAFO, mientras le baja el volumen al televisor de su casa, ubicada en la cooperativa Jaime Toral, al sur de Guayaquil. El jueves no se acordó que la niña competía, pero se llenó de gusto ayer por la mañana, cuando su hija Angélica le dio la noticia.
Angélica había escuchado el resultado de la carrera por radio Caracol de Colombia, para la cual Maribel había concedido una entrevista. No era para menos, la adolescente de 17 años captó la atención de los medios al batir 3 veces el récord sudamericano de la categoría.
En la primera ronda, la guayaquileña detuvo el reloj en 13s 32c, con lo que pulverizó su propia marca nacional y sudamericana: 13s 49c, conseguida también en Cali, el 28 de noviembre de 2014 durante el Campeonato Sudamericano.
No conforme con aquello, en las semifinales, Caicedo deshizo su marca otra vez, corriendo la distancia en 13s 11c y la volvió a mejorar al cronometrar 13s 04c en la final.
La presea dorada cayó como un bálsamo en el hogar de la joven, donde es motivo de orgullo.
Y es que Maribel creció en un ambiente humilde, donde todos suman para sacar adelante a la familia. Wilson Caicedo (38 años), padre de la chica, trabaja como pintor de casas; y sus tías Angélica (30 años) y Jazmín (27 años) laboran -respectivamente- como asistente doméstica y como guardia de seguridad en una empresa de la ciudad.
Maribel creció con doña Gledis, ya que su madre, antes de retornar a Esmeraldas, se la encomendó cuando tenía un año. Su abuelita cuenta que la carrera de su nieta comenzó a los 8 años, gracias a Jazmín, quien también era atleta. Fue ella quien la llevó a entrenarse. Ahí nació el vínculo entre la campeona y el deporte, actividad en la que la adiestradora Fátima Navarro ha sido fundamental.
La rutina de Maribel es exigente. Luego de terminar clases en el colegio Eloy Alfaro, donde cursa el tercer año de bachillerato, a las 15:00 se traslada a sus prácticas en la Federación Deportiva Nacional del Ecuador (Fedenador), ubicada al norte de Guayaquil.
El viaje es largo, ya que la vivienda de la deportista está ubicada en la cooperativa Jaime Toral, al sur de la urbe. Tras la instrucción física, Maribel retorna al domicilio a las 20:00 y se ocupa de sus tareas colegiales. Su aspiración es continuar después los estudios universitarios y seguir en el atletismo.
Sobre su desempeño en el Mundial de Cali, la técnica Fátima Navarro comentó para la página web de la Federación Ecuatoriana de Atletismo (FEA) que 2015 ha sido muy competitivo a escala internacional, pero la joven ha sabido manejarse con acierto para llegar al certamen sin lesiones y en plenitud de forma.
La madurez de Maribel la empuja a superar momentos difíciles, como el ocurrido en mayo pasado en el Campeonato Sudamericano Juvenil, que se celebró en Cuenca.
En aquella ocasión, Caicedo, que era favorita para obtener la presea dorada en los 100 metros vallas, tropezó con uno de los obstáculos y no completó la prueba. Le resultó frustrante perder el primer lugar, provocar que la brasileña Lais Rodríguez cayera y que la chilena Clara Marín, quien venía detrás, se colgara la medalla de oro.
Sin embargo, Maribel se tomó la revancha y sintió una emoción muy especial tras cruzar la meta en el estadio Pascual Guerrero, de Cali. “No puedo creerlo. Es un récord sudamericano. Trabajé muy duro para esto en Guayaquil”, mencionó.
Su sorpresa era mayúscula. Dejó segunda a la estadounidense Brittey Humphrey (13s 22c), tercera a la francesa Sara Koutouan (13s 29c) e impresionantemente a la estadounidense Alexis Duncan, que en la semifinal puso el crono más rápido de la temporada (12s 95c), terminó séptima (13s 56c). Contra Duncan, que iba primera, conspiró el toparse con la tercera valla y perder el ritmo.
Eso ya no importa. Ahora, doña Gledis espera con los brazos abiertos a su nieta, que le ayuda a aliviar su enfermedad. “En diciembre sufrí una trombosis; Maribel me compra los remedios. Dios quiera salga adelante en lo que hace y no la dejen de apoyar”. (I)
Datos
Maribel Vanessa Caicedo Vernaza nació en Guayaquil el 1 de abril de 1998. Tiene 2 hermanas menores, una de 9 años y la otra recién nacida, de apenas 2 meses.
Además de salto con vallas, Maribel ha competido en lides de postas, 100 metros planos y en salto largo. Su especialidad son los 100 metros con obstáculos. Sus compañeros la apodaron ‘Estrellita’.
Según datos de la Fedeguayas, la porteña obtuvo sus primeras preseas de competencia durante los Juegos Nacionales de Menores de 2010. Se adjudicó el oro en salto largo y las de plata en 80 y 150 metros llanos.
En abril de 2015, con 13s 99c Maribel bajó la marca nacional anterior (14s 02c) de los 100 metros vallas. En la actualidad consta en el Plan de Alto Rendimiento del Estado, gracias al que percibe mensualmente $ 354.
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